domingo, febrero 13, 2011

Mis respuestas a siete preguntas políticas sobre América hechas desde Canadá



Pedro Echeverría V.


Mi amigo, el periodista "Juanito Guanabacoa", muy preocupado por los problemas socio-políticos de America, me ha enviado desde Canadá, siete preguntas buscando que también otros colegas suyos de diferentes países le den sus respuestas:


1. ¿Hay opción político-social de transformación en México y Colombia, a partir de las instituciones existentes? Desde luego que hay enormes posibilidades de transformación política y social, pero no a partir de las instituciones capitalistas existentes que han sido las que han frenado el crecimiento de esos países y la distribución equitativa de sus riquezas. México tiene hoy 113 millones de habitantes y Colombia rebasa los 45 millones, pero más de la mitad de sus poblaciones viven en la pobreza y la miseria. Los dos países han sido gobernados durante más de un siglo por poderosas oligarquías militares y civiles que han mantenido a la población sin posibilidades de intervenir directamente en la solución de sus problemas básicos. Ambos países han sido azotados por el narcotráfico y sus gobiernos, empresarios y Estado en su conjunto ha sido penetrados por los negocios que se realizan alrededor de la producción y distribución de la droga.


2. ¿Qué tiene que ocurrir para que se den movimientos sociales de la magnitud que se dieron hace 30 años en ambos países? Hace 30, a principios de los años ochenta, comenzó a imponerse en Neoliberalismo en el mundo. Este modelo económico, político, cultural, creado por los asesores de la Thatcher y Reagan, consistía en impulsar la privatización en todos los campos y al mismo tiempo acabar con la intervención del Estado en la economía, todo en nombre de la globalización y la plena libertad de mercados. En las estadísticas la macroeconomía y el comercio crecieron, pero sólo en beneficio de los más grandes magnates del capital; millones de pequeños negocios que no pudieron competir desaparecieron y la distribución de la riqueza se hizo mucho más injusta al concentrarse entre una minoría. En vez de grandes movimiento sociales como reacción contra el gigantesco desempleo y los salarios miserables, se registró un enorme crecimiento del trabajo informal, de la migración y eso que llaman delincuencia.


3. ¿Qué similitudes existen en las políticas gubernamentales contra los líderes sociales en estos países? Los gobiernos de México y Colombia, así como los de Perú, Costa Rica y casi toda Centroamérica, han jugado el papel de puntales de los intereses de los EEUU en el continente. De distinta manera, pero con firmeza esos gobiernos han perseguido a los líderes sociales radicales, los han encarcelado y muchas veces asesinado. En México, desde que asumió el gobierno Calderón en 2006, el ejército y la policía –con el pretexto de combatir el narcotráfico- ha ocupado los principales estados del país. En Colombia, con una poderosa guerrilla que lleva 45 años de lucha por la causa de los pobres y explotados, los gobiernos no han dejado de recibir apoyos económicos y militares yanquis para acabar con la FARC. Lo mismo puede decirse de los otros países que durante más de un siglo no han podido desarrollarse porque sus políticas sólo han beneficiado a unas cuantas familias.


4. ¿Podremos concluir de alguna manera que un ciclo arbitrario de 50 años es significativo para ver que el Sistema sigue causando los mismos males? Sí, es el ciclo que generalmente me pongo por ser yo producto de la Revolución cubana que triunfó en 1959. Recuerdo que hace 52 años me estaba planteando una revolución como la cubana y gozando con alegría las luchas de países africanos 8casualmente Egipto, Argelia, Marruecos) por su liberación del imperialismo francés, inglés y yanqui. Hace 50 años en Colombia alternaban en el gobierno el partido Conservador de Laureano Gómez, Mariano Ospina y Rojas Pinilla, y el Liberal de Lleras Camargo y López Michelsen; mientras tanto en México gobernaba el priísta López Mateos y jugaban los expresidentes: por la derecha Miguel Alemán y por la centroizquierda Lázaro Cárdenas. Mientras tanto las organizaciones de izquierda eran semilegales y otras clandestinas.


5. ¿Que pasa con la clase media en México, Colombia y América Latina? Este problema de las clases medias ha sido analizado en México desde los años treinta, pero más desde los cincuenta cuando comenzó a crecer aceleradamente como producto de la urbanización. Marx le llamó pequeña burguesía para diferenciarla del proletariado y las clases altas o burguesía. Las clases medias crecieron junta a la industrialización, pero sobre todo el sector servicios. Marx ubicó a la pequeña burguesía con aspiraciones de hacerse rica y ser clase dominante, pero el desarrollo del capitalismo fue sometiéndola hasta hacerlas clases medias bajas y proletarizarla. En los años sesenta el grupo de Frankfurt, particularmente Adorno y Marcuse, hablaron de las clases marginales y englobaron a las mujeres, los estudiantes, los marginales como fuerza revolucionarias ante una "aristocracia obrera" que se había integrado al capitalismo. Estos puntos de vista aceleraron la polémica. Hay se habla de "sociedad civil" envolviendo a medieros.


6. ¿Podrá el capitalismo poner a las clases medias contra la lucha de los trabajadores que buscan liberarse? No se lo que pasará. Las clases medias crecen rápidamente, al mismo ritmo en que el capitalismo se extiende. Los medios de información, en particular la televisión, penetran en el 95 por ciento de los hogares haciendo más extensa la ideología capitalista, el individualismo y el odio contra todo aquello que signifique colectividad. Las clases medias son muy difíciles de ubicar por sus aspiraciones –como profesionistas o trabajadores de "cuello blanco", a ser clase dominante. En el capitalismo de los países desarrollados el proletario explotado, oprimido y miserable de Marx de mediados del XIX –sobre todo el de la gran industria capitalista- es ya minoritario, Un porcentaje de ese proletariado ya es clase media y busca imitar la vida de los burgueses. Todos aquellos que no lograron enraizar su conciencia de clase hoy son simples marionetas del consumismo capitalista.


7. ¿Cuáles podrían ser las resultantes si la sociedad en su conjunto mantiene una posición pasiva? Se cumpliría plenamente el planteamiento de Darwin en el sentido del "triunfo de los más fuertes y mejor adaptados", esto en el capitalismo quiere decir una mayor consolidación de la riqueza entre los menos y la explotación y la miseria entre los más. Pero los izquierdistas y marxistas, aunque en determinadas coyunturas vean la pasividad y se desesperen ante ella, viven –no se si como los religiosos- con la esperanza de que en otras coyunturas de crisis la sociedad se levante y cambie las cosas en su propio beneficio. No se entre cuántos años o décadas. Túnez y Egipto, así como Venezuela y Bolivia, están poniendo ejemplos de lo mucho que hay que hacer. ¿Puede dejarse a un lado lo que representa en estos años China, India, Brasil, Rusia y otros países que están confrontando sus economías y políticas con el imperio yanqui? Mi querido Juanito no hay que perder las esperanzas, aunque allí en tu Canadá se viva con muchas comodidades.


http://pedroecheverríav.wordpress.com

 

Calderón aumenta deuda de México con el BM a 12 mil 500 MDD


Érika Ramírez
13 Febrero 2011

México se convierte en el tercer "cliente" más importante del Banco Mundial, con una deuda acumulada de 12 mil 500 millones de dólares, unos 150 mil 500 millones de pesos. De 2007 a la fecha, el gobierno de Calderón adquirió compromisos por más de 99 mil millones de pesos. Los préstamos se pactaron a la par de una "estrategia" elaborada por la institución financiera, en la que marcó "recomendaciones" a seguir por el gobierno de Felipe Calderón. El organismo internacional había reprobado a Luz y Fuerza del Centro. Un año después, la administración panista la liquidó

Con más de 12 mil 500 millones de dólares, traducidos en deuda con el Banco Mundial, México se convierte en el tercer cliente financiero "más importante" para la institución internacional. Sólo dos países aparecen más endeudados: las potencias económicas regionales Brasil y China, indican estadísticas internas del organismo financiero entregadas a Contralínea.

Entre 2009 y 2010, la administración de Felipe Calderón Hinojosa asumió deudas por más de 8 mil millones de dólares con la organización financiera. De la mano, la institución bancaria hace "observaciones" a las autoridades mexicanas de los "riesgos" por los que atraviesa el país, desde la dependencia fiscal por ingresos petroleros, la competitividad de largo plazo, la cohesión social hasta el consenso para las reformas estructurales. Así lo muestra el informe Estrategia con México 2008-2013 (folio 42846-MX), elaborado por el organismo.

En entrevista con Contralínea, Harold Bedoya, gerente de Operaciones del Banco Mundial para México y Colombia, asegura que el país es uno de los clientes más importantes para la institución crediticia. Al tiempo, rechaza que el organismo dicte normas o políticas al país en materia económica, financiera y social.

En su página de internet, la institución indica que los proyectos activos adquiridos por México desde que Calderón asumió la Presidencia ascienden a 8 mil 226 millones de dólares, aproximadamente 99 mil 123 millones de pesos. El país deberá saldar el monto en los próximos 25 años, dependiendo del tiempo que perdure el esquema crediticio.

Con 44 proyectos por desarrollar en diversos sectores del país, el documento muestra que entre las "deficiencias" de México que consideraba el Banco Mundial, se encontraba la operatividad de Luz y Fuerza del Centro (LFC), liquidada por decreto presidencial un año después de que se hiciera público el informe 42846-MX.

La "estrategia" también pone énfasis en la "volatilidad política" a la que están sujetos los programas relacionados con la distribución de agua potable e infraestructura carretera, por lo que propone un "fortalecimiento institucional" en las diversas áreas.

Sedena indaga mantenimiento de helicópteros



Miguel Badillo *
13 Febrero 2011

Aunque la "guerra" inventada por Felipe Calderón en contra de los cárteles de la droga ha dejado de ser una "guerra" por designio de él mismo, es una realidad el incremento en los fondos públicos destinados para que las Fuerzas Armadas puedan adquirir mejor armamento y más aeronaves que les permitan hacerle frente al crimen organizado.

En la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) apenas se están reponiendo del susto que les causó una investigación del Órgano Interno de Control (OIC) –cuyo titular es un militar– sobre un contrato para dar mantenimiento a cinco helicópteros Mi-17, cuando esa misma dependencia, junto con la de Marina, solicitaron la autorización de la Secretaría de Hacienda para adquirir otras 17 aeronaves a un costo aproximado de 10 mil millones de pesos.

En el expediente abierto por el OIC de la Sedena, se explica que la Dirección General de Administración de esa Secretaría asignó de manera directa un contrato millonario a la empresa Volans, SA de CV, cuyo director general es el ruso Yuriy Chumak, para el mantenimiento en Rusia de cinco helicópteros Mi-17; sin embargo, las aeronaves nunca se enviaron a ese país y siempre permanecieron en México, donde actualmente siguen volando.

Esto generó dudas e inquietud en algunos mandos castrenses, pues en los últimos años han ocurrido accidentes aéreos que han costado la vida de militares. Además, hay varios niveles de mantenimiento: en Rusia alcanzan un nivel V de reparación, mientras que el máximo en México es III.

En 2009, el OIC solicitó la información de ese contrato millonario a la Dirección General de Administración de la Sedena, pues el secretario de la Función Pública, Salvador Vega Casillas, pidió conocer cómo se habían gastado esos recursos públicos.

Violaciones a los DH en cárceles de Chiapas

Nancy Flores

En 2010, los internos del sistema carcelario chiapaneco sufrieron acoso, intimidación y violencia atribuidos a integrantes de la Policía Federal, Federal Ministerial, Estatal Preventiva y Ministerial, señala un informe del Centro Fray Bartolomé de las Casas. Además, revela violaciones graves a los derechos humanos de los presos y sus familiares, como tratos o penas crueles, inhumanas o degradantes, desnudez forzada, violencia sexual y hacinamiento. El gobierno de Chiapas niega las acusaciones

"Como a las tres o cuatro de la mañana, entraron militares, sectoriales y no sé quiénes más. Entraron disparando armas, tirando gases. Se escuchaban como bombas", indica el testimonio de Juana.

Desde una ventana de la unidad femenil del Centro Estatal para la Reinserción Social de Sentenciados (CERSS) El Amate –ubicado en el municipio de Cintalapa, Chiapas–, la interna observó lo que ocurría del otro lado, donde están recluidos los hombres.

Era la madrugada del 24 de julio de 2010. Integrantes de la Policía Federal, Policía Federal Ministerial, Policía Estatal Preventiva y Policía Ministerial local ingresaron al área de la población varonil para poner fin a un supuesto motín, indica el Informe especial. Violaciones a los derechos humanos en el sistema carcelario en Chiapas, del Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas (Frayba).

"Nosotras tenemos familiares allá y no nos dan información. Están esposados, golpeados, ensangrentados. Desde la ventana del (sector) femenil, se ve todo. Ellos están sufriendo. También a las visitas les aventaron gases", señala Juana en su denuncia.

 

Firmeza y políticas que la respalden


Utopía


Eduardo Ibarra Aguirre


A los colegas y amigos Jacobo Morett Estévez, Fernando González Mora y

José Cabrera Parra, en el orden en que se nos adelantaron el 8, 10 y 12 de febrero.


Una "respuesta mucho más firme" del gobierno de Felipe Calderón ante el despliegue de actitudes injerencistas de la Casa Blanca y sus secretarios y ahora del esposo de Carla Bruni, Nicolas Sarkozy, demandó el rector de la Universidad Nacional Autónoma de México.


A juicio de José Narro Robles "No es nada más invocando la sensibilidad de otros mandatarios; se requiere demandar respeto a nuestro país, a nuestra autonomía y soberanía". La pertinente declaración se formuló en el lugar menos indicado, el festejo por el cumpleaños sin número de Josefina Vázquez Mota, coordinadora de la bancada panista en San Lázaro e integrante de lo que queda del otrora grupo compacto de Calderón Hinojosa, es decir, el que traza las políticas que ejecutan los secretarios, incluida la exterior y en particular hacia Estados Unidos.


No ignoro que Vázquez Mota, la misma que obsequió 84 iPads a igual número de obispos a través de la inexistente Fundación Luis María Martínez, pero todo indica que con recursos del erario (Forum en Línea número 212), tejió vínculos como secretaria de Educación con Narro Robles, y que éste sólo "acudió a expresarle el respeto personal (sic) que tengo por ella", pero se precisa de un mínimo de coherencia entre lo que se declara y lo que se hace, como tampoco la mostró Narro al involucrar a la UNAM --y no "a titulo personal"-- con Iniciativa México, la última operación del duopolio televisivo y el oligopolio radiofónico para reposicionarse.


Mas tiene razón el maestro de Saltillo, Coahuila, cuando postula: "Un mundo tan interconectado, tan globalizado como el que nos ha tocado vivir, requiere y reclama comprensión a los problemas y más cuando se trata de vecinos".


Allí mismo, en el Club de Industriales, le contestó José Francisco Blake. "¡Qué más firmeza puede haber, si con firmeza, con carácter y con determinación estamos enfrentando el desafío que tiene el país con el crimen organizado!"


La firmeza no está a discusión, sino las estrategias que privilegian tozudamente los aspectos militares y policiacos en detrimento del trabajo de inteligencia, la vigilancia a los circuitos financieros y bursátiles, el tejido social muy lastimado, la educación y el empleo.


Pero también la insuficiente firmeza de Barack Hussein Obama para asumir la responsabilidad de Estados Unidos por poseer el mercado de narcóticos más demandante y solvente del orbe, a la vez que el abastecimiento interrumpido de armas a las bandas delictivas mexicanas. Excelente negocio por partida triple, si incluimos la alienación como método de gobierno.


Firmeza oratoria, por otra parte, que pasó de noche o de plano no convenció el comandante supremo de las fuerzas armadas, en Saucillo, Chihuahua. "El Estado mexicano, sus fuerzas armadas, no están invadiendo ningún territorio extranjero, están defendiendo nuestro propio territorio, no están ambicionando apoderarse de recursos naturales de otra índole que no nos pertenecen", dijo muy bien y nuevamente portando las cinco estrellas a los que desde el Pentágono, el Departamento de Estado y Seguridad Interior pujan por sembrar discordias entre el Ejército y la Marina, cuestionan la capacidad del primero y del gobierno en su conjunto para frenar la inseguridad y la violencia, simultáneamente a los persistentes esfuerzos por incluir al narcotráfico en la cruzada global contra el terrorismo –cualquier cosa que esto signifique-- y por colocarle el marbete de insurgencia para que el imperio disponga de los pretextos que necesite en sus planes geoestratégicos.


Sin embargo, para que la firmeza tenga trascendencia se precisa de políticas y programas que disminuyan la creciente subordinación de México a Estados Unidos y estimulen la interdependencia.


Acuse de recibo


El senador José Luis García Zalvidea responde anticipadamente a su interrogante: "No creo que nadie conteste esta pregunta, pero ¿hay realmente alguna evidencia que muestre claramente la presión de Presidencia para eliminar el programa de Aristegui? Aclaro que no soy partidario de Felipito. Saludos". Lo anterior a propósito de Respuesta de Los Pinos (11-II-11)… Norma Falcón agrega sobre la misma Utopía: "México está dando a luz un pueblo libre como la salud social reclama y la moral lo ordena, porque es un acto de fe y de justicia"… "Muchísimas felicidades por sus siete años como medio de referencia obligado en internet y gracias por todo su apoyo", dice el politólogo Carlos Álvarez Acevedo con motivo del séptimo aniversario de Forum en Línea, página electrónica quincenal a partir de que en octubre de pasado se imprimió la última edición de Forum, tras de que en abril de 2008 se publicó en la portada un cartón de Alán sobre Juan Camilo Mouriño Terrazo que irritó tanto a Los Pinos y Gobernación que ordenaron un boicot publicitario a la revista, mismo que registró Play Boy en su edición de enero pasado.

forum@forumenlinea.com

www.forumenliea

 

Devastadora, la corrupción panista



Álvaro Cepeda Neri *
13 Febrero 2011

Una década, de Fox a Calderón (2000-2010), bastó para que el Partido Acción Nacional (PAN) traicionara los postulados de los padres fundadores de ese partido y a la pléyade de mexicanos, a los que el tufo de corrupción de entonces empujó a crear el partido conservador de derecha. Abortando los principios de honradez (y honestidad, que no son lo mismo, por lo que son vasos comunicantes que se complementan) que enarboló Manuel Gómez Morín, quien alegó e impugnó que las conquistas de la Revolución (su centenario, convertido en una mascarada de marionetas, por la coalición-alianza-complicidad de Calderón y Ebrard, es decir el concubinato del Partido de la Revolución Democrática de los Chuchos y el PAN de César Nava) se habían pervertido. Y decidieron emprender la cruzada de exorcismos hasta contra lo salvable de la posrevolución: la separación entre el Estado y la iglesia, la educación laica, la expropiación petrolera y las reivindicaciones campesinas y obreras. Y combatieron a Lázaro Cárdenas para tratar de hacer tabula rasa. Era la utopía religiosa.

La moral cristiana-católica del PAN los obligó a postular la honradez como condición del ejercicio de la política. Fue su mejor bandera, sino es que la única; pero se erigieron en vigilantes del abuso del poder presidencialista, lo cual debe reconocérseles. Poco más de medio siglo (1939-2000), fueron oposición pacífica, leal a algunos fines constitucionales, pero desleales a otros. Y andando el tiempo, pasaron de la repugnancia al ejercicio del poder público a participar en las disputas electorales, para ir escalando desde sus victorias municipales y en las legislaturas de la entidad bajacaliforniana, hasta postulaciones federales, cuyos sufragios, finalmente, los llevaron hasta la Presidencia de la República. Y han fracasado como partido político y en los cargos públicos: son corruptos, fundamentalistas del más rancio moralismo, ineficaces administrativamente, payasos, mentirosos e incompetentes como gobernantes.

Los panistas, contra lo que sostuvieron Carlos Castillo Peraza-Felipe de Jesús Calderón, perdieron el partido y perdieron el gobierno. En una década, mostraron que no estaban preparados para la administración pública; pero sí para, piratas de tierra, asaltar la nave del Estado y hacer de éste un botín al amparo de la impunidad. Han sido ladrones, rateros y cínicos hasta superar al antiguo priismo, hermanados en los mismos vicios con el perredismo chuchista-ebradorista e imitadores del peñanietismo, nadando en el mito del libre mercado y el libre comercio absolutos, negándose a toda intervención para gobernar a favor del pueblo, contra los abusos empresariales de Televisa y TV Azteca, sobre todo, que han estado preparando el golpismo mediático a la par del golpismo militar calderonista (Jorge F Malem Seña, La corrupción, aspectos éticos, económicos, políticos y jurídicos).

Y han minado los derechos humanos y sus garantías en una atmósfera de total desacato a las resoluciones judiciales para proteger a las jerarquías clericales, de la alta burocracia, banqueros y empresarios. Sus "asesores" son los Enrique Krauze, los Vargas Llosa, saqueadores de Karl R Popper a su conveniencia interpretativa, impugnadores de Keynes, cuando éstos proponen intervencionismo para paliar las desigualdades sociales, los abusos y actuar contra la corrupción (Popper, Después de la sociedad abierta, y Keynes, Ensayos de persuasión).

Las causas de la violencia



Marcos Chávez *

Como jefe supremo de las Fuerzas Armadas, Felipe de Jesús Calderón se encuentra extraviado con sus falanges entre los laberintos de su propia guerra, mimetizada como una lucha contra la inseguridad. Ofuscado por su delirante triunfalismo guerrerista, sólo ve una de las múltiples máscaras de la violencia, la relacionada con el narcotráfico, cuya fisonomía ni siquiera observa en todos sus matices, mientras que a las otras manifestaciones las mira desdeñosamente. Para el comandante en jefe, las causas de las diferentes formas de las transgresiones carecen de profundas raíces sistémicas y se asemejan a simples rizomas, o a la policéfala Hidra de Lerna, si se prefiere, ante los cuales sólo se requiere de algunos años para despejar el terreno o para cortarle todas las cabezas y matarla, cual Heracles posmoderno.

Calderón supone que no le conciernen los costos y las secuelas económicas y sociopolíticas de su cruzada: las ascendentes víctimas que pueblan los escenarios de operaciones, los muertos y demás damnificados, ya sean de los Ejércitos enemigos o simples inocentes. Tampoco le interesa que, con su Estado de excepción y su conflicto bélico de dudosa fabricación jurídica, con la displicente complicidad de los poderes Legislativo y Judicial, los primeros sacrificados en la cruenta lucha hayan sido la Carta Magna, el estado de derecho, los derechos constitucionales de la población, e incluso los legales de los delincuentes, y los remedos de la democracia, figura retórica con la que medran las elites dominantes, con cuyos andrajos recubren al robusto régimen político autoritario, y a la que han aplicado la extremaunción. Como su principio persecutorio es implacable e insaciable, ante sus ojos, lo anterior son los inevitables daños colaterales que tienen que pagar y asumir los que, con su pasiva o activa permisividad, contribuyeron al desbordamiento del crimen organizado y su brutalmente sangrienta violencia: la sociedad y los precedentes gobiernos panistas y priistas.

De lábil sensibilidad, entre los estruendos del campo, el émulo de Jorge de Capadocia ha desarrollado un peculiar oído de artillero: sólo escucha a los que aprueban su estrategia. A Vicente Fox, quien se atrevió a sugerir la legalización de la producción y el comercio de las drogas para golpear a los cárteles, abatir los índices de criminalidad y retirar la anticonstitucional presencia del Ejército de las calles para evitar el mayor deterioro de su imagen, debido a su violación de los derechos humanos, le reprochó sus "muchas equivocaciones" cometidas en el combate a la delincuencia organizada y por "no actuar a tiempo", ya que "si México (sic) hubiera comenzado a luchar contra este problema antes, hace cuatro o cinco o 10 años, estaríamos hablando ahora de un asunto completamente diferente".

Francisco Blake, secretario de Gobernación, quien defiende la estrategia de tierra arrasada, afirma que la violencia se generó antes del gobierno de su jefe, y remarca que a todos los "delincuentes, sin excepción, se les va a aplicar la ley y la fuerza del Estado". ¿Incluirá en su lista a los de cuello blanco del gabinete y a los empresarios, porque sobran candidatos? Genaro García, de Seguridad Pública, sostiene que la ineficacia policial se debe al abandono sufrido hace 30 años. Este controvertido individuo recién se vio obligado a reconocer que, pese al éxito, el consumo de la mariguana se ha cuadruplicado y se ha expandido el de la cocaína y las anfetaminas. El diputado Arturo García (Partido Acción Nacional) señaló que "el problema de seguridad no fue gestado en esta administración; el modelo del crimen se incubó en la década de 1980, protegido desde el gobierno y la policía". Ante el señalamiento de Fernando H Cardoso, César Gaviria y Ernesto Zedillo, relativo al fracaso de la guerra global contra el narco y la necesidad de aplicar una nueva estrategia basada en la prevención y la educación, Calderón dijo que no ve nada nuevo en sus juicios, que compartía el primero y ya aplicaba el segundo (El Universal, 11 de agosto de 2010, 26 de enero de 2011 y 1 de febrero de 2011; La razón, 28 de octubre de 2010; La Jornada, 28 de enero de 2011).

Sin embargo, ante la crítica de los juarenses por el fracaso de la estrategia, la vieja y la "nueva", "todos somos Juárez", que prometió la incumplida recuperación de la tranquilidad para las familias de la frontera, ya que el número de homicidios en la zona se elevó de 2 mil 600 en 2009 a 3 mil 60 en 2010, y por el olvido de los 160 objetivos considerados por el plan, Calderón y sus apologistas guardaron silencio. No los escucharon (El Universal, 30 de enero de 2011). Tan exitosa ha sido la lucha que, pese al apoyo de la señora Clinton, el Congreso estadunidense está alarmado por la crisis de seguridad en México (La Jornada, 28 de enero de 2011) y las autoridades de ese país recomiendan a sus compatriotas que piensen seriamente antes de viajar a esta nación. Tampoco mereció algún comentario la declaración de Maninder Gill, del Banco Mundial (BM), quien planteó que en el esfuerzo en contra de la inseguridad y la injusticia social debe primar "la justicia social y el desarrollo económico", la atención a los niños y los jóvenes sin empleo ni trabajo, y el diálogo con la sociedad con la sociedad civil (El Universal, 27 enero de 2011).

El caso Contralínea



Sergio Méndez

Los periodistas de la revista Contralínea se han convertido en un referente de la anticorrupción en México. Su compromiso con el periodismo objetivo, valiente y crítico les ha valido tener una consistente credibilidad entre quienes reclaman, vehementemente, a los medios de comunicación, información veraz y útil.

En un mundo dominado por la poderosa oligarquía económica, interesada en mantener sus privilegios, los medios masivos de comunicación, como la televisión y la radio, no escapan a su rígido control.

Los beneficiarios de la corrupción pretenden controlar la información sobre los temas de interés público, respecto de los cuales construyen sus grandes negocios ilegítimos, e intentan mantenerse impunes, judicial y mediáticamente, con un sólido sentido de la complicidad. Por eso, una revista como Contralínea es tan apreciada: se arriesga para informar lo que a todos nos interesa; lucha por la transparencia.

Sin embargo, la otra cara de la moneda de informar con libertad es la represión que sufren sus periodistas. Tanto empresarios como funcionarios han hecho todo lo posible por aniquilar la revista incómoda. El gobierno federal le retiró la publicidad oficial cuando la periodista Ana Lilia Pérez exhibió los negocios presuntamente irregulares de Juan Camilo Mouriño y de César Nava con Petróleos Mexicanos (Pemex). Para el señor Calderón, la osadía de la valiente periodista resultó imperdonable. A Jesús Zaragoza López, empresario gasero de Ciudad Juárez, y al señor Antonio Juan Marcos Issa, exfuncionario de Pemex, no les gustó que los periodistas de Contralínea expusieran sus prácticas empresariales presuntamente ilícitas con la paraestatal petrolera mexicana. El costo de informar fueron demandas por daño moral en varios estados del país. Además, las oficinas de la revista han sido allanadas y saqueadas, lo que implica un claro mensaje intimidatorio.

Por ambas circunstancias, el boicot publicitario y el acoso judicial por las demandas del señor Zaragoza, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos emitió la recomendación 57/2009. La Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal investiga los allanamientos y la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal tiene conocimiento de los actos represivos.

Lo más reciente es la sentencia condenatoria en contra de los periodistas de Contralínea, dictada el 3 de enero de 2011 por la jueza 54 Civil del Distrito Federal, Yassmín Alonso Tolamatl. La resolución fue producto de un juicio por daño moral iniciado, entre otros, por el señor Antonio Juan Marcos Issa. Al empresario petrolero, excoordinador de asesores de dos directores generales de Pemex, le molestó sobremanera que Contralínea expusiera en sus páginas, entre otras cosas, que la Auditoría Superior de la Federación había señalado que las empresas del demandante le rentaban barcos a la paraestatal de todos los mexicanos por un monto mayor de lo que hubiesen costado nuevos.

Después de un juicio largo, la jueza 54 dictó una sentencia insólita por resultar completamente absurda e ilícita. La señora Alonso dijo, en su resolución, que los asuntos relacionados con Pemex no son de interés público, porque son temas para especialistas, que la gente y ella misma desconocen. Señaló que los periodistas no están autorizados para opinar sobre las licitaciones que lleva a cabo el gobierno. Inclusive, el caricaturista David Manrique fue sancionado porque a la jueza le pareció ofensivo el trabajo artístico del monero. Además, condenó a los periodistas a jamás volver a publicar nada que les incomode a los demandantes, a pagarles una indemnización y a publicar partes de la sentencia en un diario de amplia circulación.

La sentencia ya fue apelada por los periodistas. El asunto lo resolverá en segunda instancia una Sala Civil de Apelación del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal. Seguramente el caso llegará hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación y, de ser necesario, al Sistema Interamericano de Derechos Humanos. El caso es paradigmático y de gran importancia; es necesario consolidar los criterios protectores del trabajo periodístico que nuestro tribunal constitucional y que los tribunales internacionales ya han emitido. Los jueces mexicanos, con excepción de los ministros de la Corte, se niegan a garantizar el ejercicio de la libertad de expresión de los periodistas y el derecho a la información de toda la sociedad, lo que, sin duda, debe ser revertido.

Los criterios que se pretenden fortalecer para garantizar la libertad de los periodistas a informar, a partir del caso Contralínea, son:

1. Que los periodistas sólo tienen el deber de acreditar que sus fuentes informativas existen y de realizar una razonable investigación respecto de los hechos que informan y no a que su opinión o su "verdad" sobre los hechos investigados necesariamente coincida con la "opinión" o la "verdad" de los demás. Las opiniones no pueden ser ciertas o falsas.

2. Que los periodistas no tienen que aportar pruebas formalmente generadas, como si fuesen jueces o ministerios públicos, para demostrar que sus fuentes de información existen. Deberá ser suficiente que por cualquier medio, por ejemplo una inspección en una página de internet, se acredite la existencia de las fuentes.

3. Que los periodistas no puedan ser sancionados, salvo que se demuestre que sus fuentes no existen, que las emplearon sabiendo sobre su inexistencia y con la indubitable intención de dañar. Además, se tiene que acreditar la existencia de una verdadera lesión al patrimonio moral de quien demanda.

4. Que los periodistas no deben ser criminalizados con la imposición de sanciones económicas desproporcionadas y tampoco a que por siempre y para siempre, como lo pretende la jueza Alonso, dejen de escribir sobre ciertos temas y personas.

Defender a la revista Contralínea implica proteger las libertades de todos los mexicanos. ¡Viva la revista Contralínea!

*Abogado defensor de los derechos humanos

Alcoholismo y poder en el Estado



Álvaro Cepeda Neri *

Más de uno de nuestros presidentes del montón ha padecido, aparte de la enfermedad-perversidad siquiátrica del autoritarismo político, alguna enfermedad física. Victoriano Huerta era alcohólico y neurasténico, casi loco. López Mateos sufría de fuertes migrañas, que pusieron en riesgo su permanencia en la Presidencia (autoritario y brutalmente represivo, como su sucesor Díaz Ordaz, aunque éste lo superó en maldad al ordenar la matanza de 1968). Echeverría, López Portillo, Salinas y Zedillo padecieron la gula de la egolatría y abusaron del poder con sus arranques trogloditas. De la Madrid tuvo el mal de la mediocridad, casi hasta la imbecilidad. Fox tuvo delirio de grandeza y, alto físicamente, fue un enano manipulado por el desbordado matriarcado (que le impusieron su madre y su segunda esposa). Y llegamos a Calderón, a quien recio y quedito se le imputa la adicción al alcohol, y casi llegando al delírium trémens a medida que se le nota desesperado por alcanzar la otra orilla hacia el final de su mal gobierno derechista, yunquista y panista.

Sobre las enfermedades de los hombres (y mujeres) en el poder del Estado, particularmente presidencias, primeros ministros o jefes de Estado y jefes de gobierno, David Owen publica el libro En el poder y en la enfermedad. Enfermedades de jefes de Estado y de Gobierno en los últimos años (1901-2007). La traducción es de María Condor.

En cuatro amplísimos capítulos se ocupa de "Enfermedades de jefes de Estado y de gobierno en los últimos años"; "Historiales"; "La embriaguez del poder", y "Lecciones para el futuro". Una conclusión y notas con su respaldo bibliográfico. No aparece el caso de Calderón, pero sí el alcohólico Bush; Kennedy, con sus dolores de espalda y su enfermizo apetito sexual; Theodore Roosevelt; Woodrow Wilson… ¡Hitler, el paranoico e imbécil racista!; Churchill, sus males cardiacos y alcoholismo; Franklin Delano Roosevelt, paralizado de la cadera hacia abajo, etcétera.

Es un libro sensacional para tomar en cuenta lo que sucede cuando un enfermo (en el caso mexicano actual: un alcohólico) está en un cargo público, con gravísimas "consecuencias por dichas enfermedades (adicciones) para la tarea de gobernar". Y aunque se eviten expresiones como locura o demencia, "durante siglos se ha observado que algo ocurre en la estabilidad mental de algunas personas cuando están en el poder. La expresión de Bertrand Russell "embriaguez del poder" capta muy bien la relación causal entre detentar el poder y una conducta aberrante que tiene un tufo a inestabilidad mental. La embriaguez, en el sentido del alcoholismo, hace de los gobernantes enemigos de la realidad y "prefieren la vacilación, la duda y los titubeos… con estrés postraumático". Para advertir a tiempo la enfermedad de un político en el poder, "la prensa tiene en esto un papel clave (para que nos proporcione), más pistas e información que nos ponga sobre aviso".

Ficha bibliográfica:

Autor: David Owen

Título: En el poder y en la enfermedad

Editorial: Ediciones Siruela, 2010

*Periodista

Carmen Aristegui: ¿Qué hacer?


Miguel Ángel Granados Chapa

MÉXICO, D.F., 12 de febrero.- Una vez más Carmen Aristegui ha sido arrojada fuera del circuito radiofónico. La coartada que esta vez sirvió para que MVS resolviera separarla partió de un hecho cuyo alcance y significado admite diversas interpretaciones pero que tenía importancia noticiosa: un escándalo en la Cámara de Diputados por un señalamiento de legisladores de la oposición al presidente de la República. La periodista, al presentar el suceso en su emisión del viernes 4 de febrero, situó en un contexto necesario el mensaje de los impugnadores del presidente y concluyó con una pregunta y una petición: ¿Hay problemas con el modo de beber del presidente? Sería sano que Los Pinos lo aclarara.

La Presidencia lo negó el miércoles 9 de febrero, ya tarde. El secretario particular de Felipe Calderón, Roberto Gil Zuarth, dio respuesta a la interrogante de la aguerrida pero sobre todo inteligente periodista. Bastó que describiera la laboriosidad presidencial, lo apretado de su agenda, su diligencia notoria, atestiguada por toda suerte de personas que lo han visto pleno de salud. Lo que pudo decirse el viernes mismo se aplazó hasta cinco días más tarde, cuando ya se habían amontonado los acontecimientos: Carmen Aristegui no condujo su emisión matutina en el 102.5 del cuadrante capitalino de FM; se generó una vastísima, multitudinaria protesta en las calles y en las redes sociales, y la periodista, al sentar su posición, anunció estar dispuesta a retomar el micrófono (ella dijo que el lunes 14, lo que sería simbólico, aunque podría ser otro día próximo) si se lavaba su nombre, ensuciado por la afirmación de que rompió el código de ética al presentar como noticia un rumor.

A pesar de que la dignidad de Carmen Aristegui la condujo a poner muy alta la cota de actitudes a tomar, los protagonistas del suceso respondieron al acicate que resultó de su mensaje. La Presidencia, que había negado tener que ver con el despido de la periodista (pero que cándidamente aceptó que la concesionaria le dio cuenta de lo ocurrido, lo cual sólo es comprensible como si se le ofreciera una satisfacción), produjo el informe sobre la agenda presidencial, de cuyo conocimiento se desprende que Felipe Calderón goza de cabal salud. Y MVS, en vez de rechazar la disposición de su estrella hasta el viernes anterior (que estaba en ascenso, cada vez con más estaciones interesadas en repetir el noticiario), sólo anunció que tomaría decisiones en los próximos días.

En la noche del jueves 10, cuando se escriben estas líneas, esa era la situación. Cabe esperar una rectificación y que Carmen vuelva al aire la próxima semana, no necesariamente el lunes, si su reputación queda a salvo. Parece haber quedado claro que el episodio generó sólo pérdidas para todos, que son remediables con buena voluntad (tener presente la cual no es por fuerza candor pueril).

Pero todos, y no sólo Carmen Aristegui, debemos pensar en qué hacer. Todos, digo, porque el problema laboral de la periodista no es sólo un problema laboral, sino un desgarramiento en el tejido social, tan en mal estado por el amontonamiento de crisis que padece nuestro país, en medio de las cuales es imprescindible la información y el análisis, al mismo tiempo lúcido e independiente que ejerce Carmen Aristegui.

Algunos pasos en la solución que todos debemos generar le corresponden a ella directamente, por supuesto. Si no se concretara el entendimiento sugerido por las posiciones de las partes, queda a la periodista el camino legal para buscar su reinstalación. Ella y MVS firmaron en enero de 2009 un contrato cuyos términos tal vez fueron violados por la empresa. Es que, anexo al contrato, forma parte de la relación profesional el código de ética al que se refirió la concesionaria, pero que incluye un mecanismo que dejó de observarse en la actitud empresarial. Cuando una de las partes juzgue que se ha violado el código, ha de acudir a un árbitro cuya actuación está prevista en los propios documentos, nombrado con la aquiescencia de las partes y cuya labor consiste en determinar si se violó el código y el modo de enmendar su vulneración, que ni por asomo incluye la ruptura laboral. Aunque la ruina de José Gutiérrez Vivó se gestó en amplia medida en la lentitud y lenidad de los tribunales, que bendijeron o fueron incapaces de impedir el abuso del Grupo Radio Centro, una vía a la mano, si no se recapacita, es el ejercicio de acciones legales.

Otra vía a recorrer, de difícil trazo y práctica aún más complicada, consiste en que la sociedad que ahora airada protesta se organice en torno de Carmen para dotarla de los instrumentos propios de su trabajo. Lo propuse cuando en enero de 2008 los grupos Prisa y Televisa la despidieron de XEW. Se trata de aprovechar la movilización que crece a causa de esta nueva arbitrariedad para constituir una sociedad anónima en que miles de accionistas integren un capital suficiente para emprender tareas de comunicación electrónica. Claro que el gobierno que irritado reprime a Carmen no le facilitará un acceso de este género. Pero sin dejar de intentar que la sociedad mercantil imaginada adquiera su propia concesión, es de investigar la posibilidad de tomar en arrendamiento tiempos en emisoras carentes de programación propia que obtienen ganancias vendiendo tiempo a adquirentes responsables de los contenidos. La producción radiofónica así lograda debería encontrar salidas paralelas y simultáneas en internet y otras formas de conexión. No es ciertamente una empresa sencilla, pero otros lances de represión editorial encontraron en esta vía el camino para su construcción. Es muy difícil, pero no imposible.

Pensemos también en que Carmen tenga acceso a canales de difusión públicos, como Radio UNAM. Cuando en 2008 la periodista fue despojada de su micrófono se exploró esa posibilidad, también difícil de concretar porque técnica y financieramente las frecuencias universitarias no están habilitadas para la competencia comercial. Pero si fuera preciso, es posible imaginar fórmulas que con respeto pleno a la legislación universitaria permitan, a través de asociaciones civiles y aun sociedades mercantiles no lucrativas, la presencia de una voz libre como la de Carmen en el espacio universitario.

Fórmulas de la misma naturaleza se pueden poner en práctica en canales de difusión que existen sólo virtualmente ahora y que podrían aprovechar la experiencia y el talante profesional de Carmen. Por sólo aventurar ejemplos, puede pensarse en el canal digital de televisión concesionado por la Cofetel al gobierno de la Ciudad de México o el permiso para operar una radioemisora a la Universidad Autónoma Metropolitana. La estipulación de condiciones claras para una tarea conjunta en que los intereses de las partes queden escrupulosamente protegidos, y los de la periodista a salvo de coyunturas políticas, sería una fórmula que daría sentido desde el principio a esas iniciativas de difusión que no se han echado a andar.

Muchas otras personas tendrán sin duda muchas otras ideas sobre cómo trascender de la cólera civil a la práctica de una comunicación democrática. Lo importante es que el pasmo no nos venza y superemos la etapa de la neurosis contemplativa y la denuncia flamígera.

Algo, mucho, tendremos que hacer.

Carta abierta a Joaquín Vargas



FOTO: Octavio Gómez
La clausura simbólica de MVS.

Denise Dresser

Estimado Joaquín:

Te escribo desde el desconcierto que me ha producido el despido de Carmen Aristegui por la supuesta violación del código de ética de MVS. Yo he sido colaboradora de MVS Radio desde hace dos años, como participante en la mesa política de los lunes. Siempre he agradecido el espacio, el apoyo y la libertad que durante ese tiempo nos brindaste allí. Siempre he pensado en ti como un hombre dispuesto a tomar riesgos, defender principios, asumir posiciones impopulares y enfrentarte al gobierno cuando ha sido necesario. Por ello me resulta aún más sorpresiva tu decisión, la cual corre en contra de tu biografía, la historia de la empresa y el perfil personal y profesional que has logrado construir. Me parece que has cometido un error grave, gravísimo, como resultado del cual todos pierden: pierde MVS, pierdes tú, pierde la libertad de expresión, pierde la Presidencia, pierde el país. He aquí las razones:

Nunca habrá un consenso sobre la decisión de Carmen Aristegui de abordar el tema de la manta en el Congreso –denunciando el supuesto alcoholismo de Felipe Calderón– como lo hizo. Habrá quienes argumenten que informó sobre un hecho noticioso e hizo las preguntas pertinentes, y habrá quienes digan que se excedió. Habrá quienes insistan en que tenía derecho a cuestionar a Felipe Calderón como lo hizo, y habrá quienes repliquen que se equivocó. Habrá quienes subrayen que la salud mental de un presidente es un tema de interés público, y habrá quienes contesten que es del orden estrictamente privado. Habrá quienes cuestionen a Carmen por dar validez a los planteamientos de Gerardo Fernández Noroña, y habrá quienes digan que se volvieron informativamente importantes en el momento en que suspendieron las labores del Congreso.

Independientemente de la posición que los lectores, radioescuchas y ciudadanos en general asuman, lo que queda claro es que no se despide a un periodista por hacer preguntas incómodas, airear temas controvertidos o hacer comentarios editoriales que generen escozor. De ser así, ningún periodista mexicano tendría empleo en este momento. Ningún periodista internacional hubiera sobrevivido esa vara de medición. Rush Limbaugh ya hubiera sido despedido por acusar a Barack Obama de "musulmán"; William Safire hubiera sido despedido por llamar a Hillary Clinton una "mentirosa congénita"; Larry Rohter hubiera sido despedido por escribir acerca de los problemas con el alcohol que tenía Lula; Jorge Ramos hubiera sido despedido por preguntarle a Vicente Fox si usaba Prozac. Pero los despidos no se dan precisamente porque el valor fundacional de la libertad de expresión se protege por encima del interés empresarial o los sentimientos heridos del aludido.

Al emitir un comunicado en el cual aseguras que Carmen Aristegui "violó el código de ética" de la empresa, has generado una enorme –y legítima– suspicacia. En primer lugar, te verás obligado a hacer público ese código de ética, incluyendo la prohibición explícita de diseminar rumores como si fueran información, firmado por ella. Y si no lo haces, seguirás alimentando la especulación que te rodea. Que si te llamaron de Los Pinos para exigir una disculpa y por ello se la demandaste a Carmen. Que si querías hacerle un favor al gobierno –entregándole la cabeza de Carmen en bandeja de plata– a cambio de la renovación y la ampliación de tus concesiones. Que, en el momento de obtenerlas, lo primero que harás será vendérselas a Carlos Slim. Que desde hace un buen tiempo sentías que la presencia de Carmen en MVS era una amenza a tus intereses empresariales y que, en el fondo, su despido en este momento fue tan sólo un pretexto. Esto es lo que se dice sobre ti de manera reiterada. Esto es lo que sale a colación cada vez que se menciona tu nombre. Con una reacción sobredimensionada y colérica, has logrado empañar de golpe tu reputación y la de tu familia. A partir de hoy serás visto como un censor, un represor, un hombre intolerante. Alguien que no entiende los principios que la democracia –para sobrevivir– necesita resguardar.

Y aunque niegues la presión de la Presidencia, será tu palabra contra la de Carmen Aristegui. Será tu versión de los hechos contra la de ella. Y en esa confrontación llevas todas las de perder, porque había muchas formas de darle una salida a este problema. MVS pudo haber emitido un comunicado de prensa diciendo que la posición expresada por Carmen no constituía la posición oficial de la empresa, punto final. Pero al exigirle a Carmen que leyera una disculpa redactada por ti cerraste la puerta a una mejor solución para todos los involucrados.

Si tu objetivo era congraciarte con Los Pinos, en realidad le has enviado una manzana envenenada. Las protestas por parte de la Presidencia serán vistas como un esfuerzo fallido por negar su involucramiento. Si Felipe Calderón no te pidió una disculpa por parte de Carmen Aristegui, la percepción entre los millones de radioescuchas de MVS en este momento es que así fue. Si Felipe Calderón no tiene un problema de alcoholismo, después de este sainete será aún más difícil convencer a la opinión pública de lo contrario. Hoy el presidente se enfrenta a un grave problema de imagen. El que da la impresión de irritarse demasiado, negar demasiado, exigir disculpas y demandar cabezas tan sólo confirma la acusación lanzada en su contra.

Y tú, Joaquín, al actuar como lo has hecho, has contribuido a crear esa percepción. Tu comportamiento, efectivamente, ha sido suicida. Y eso, como bien dijo Carmen Aristegui en su conferencia de prensa, no lo merece tu familia, no lo merece MVS, no lo merecen los ciudadanos, no lo merece México.

Como colaboradora de MVS, como alguien que ha aplaudido la independencia y el valor civil de la empresa en el pasado, como ciudadana mexicana consciente de sus derechos y dispuesta a pelear para defenderlos, te pido que reconsideres tu postura y pares un proceso que se ha revertido en tu contra. Como escribió la novelista Pearl Buck, ganadora del Premio Nobel, "cada gran error tiene su punto medio; ese segundo cuando puede ser rectificado y quizás remediado". Ese momento ha llegado para ti, Joaquín. Ojalá apeles a los mejores ángeles de tu naturaleza, en lugar de sucumbir a los peores demonios que te han poseído en los últimos días.

(+) Este texto se publica en la edición 1789 de la revista Proceso, ya en circulación.

Si así se enojaran cuando hay razón…



Guillermo Fabela Quiñones *

Un absurdo enojo provocó al gobierno de facto de Felipe Calderón el programa televisivo de la BBC de Londres en el que sus conductores hicieron mofa de la capacidad productiva de los mexicanos. El pretexto fue la presentación de un automóvil deportivo armado en nuestro país, toda vez que los vehículos automotores reflejan la personalidad de un pueblo, según los comentaristas. Lo primero que viene a la mente es una pregunta lógica: ¿Por qué la burocracia dorada no muestra igual actitud, supuestamente patriótica, cuando los funcionarios del gobierno estadunidense acometen contra nuestro país por cualquier leve motivación?

Más bien, debería darles vergüenza –a los funcionarios del gobierno de Calderón– que se nos tenga en un concepto como el que externaron los comentaristas británicos, nada alejado de la realidad, porque eso es lo que han hecho los tecnócratas mexicanos con su forma canallesca de "gobernar". No podía esperarse otra cosa que la conformación de una sociedad en la que todo es simulación, porque así como el empresario hace como que le paga a sus empleados, así éstos hacen como que trabajan. El resultado es un país muy poco competitivo, como lo especifican evaluaciones internacionales, que camina en reversa desde hace casi tres décadas, con nulo crecimiento real y abundancia de problemas sociales, producto de la descomposición de un sistema político erosionado por la corrupción.

Lo que hicieron los conductores del programa mencionado no fue más que diseccionar, con un sentido del humor nada británico, la realidad de una nación cuya clase dirigente es incapaz de conducir a la sociedad por la ruta de una convivencia digna, que merezca el respeto de la comunidad internacional. El disgusto proviene, sin lugar a dudas, de que a la burocracia dorada le pusieron, los comentaristas del programa de la BBC, un espejo para que se mirara tal cual es, y sus integrantes dejaran de vivir autoengañados por la propaganda costosísima con la que pretenden también engañar a los mexicanos. Así queda demostrado que no tiene caso gastar tantos miles de millones de pesos en spots televisivos si la realidad es todo lo contrario.

En el exterior, saben que México va en picada porque el Estado no cumple sus responsabilidades con la sociedad. Fuera de nuestras fronteras, no se tragan las mentiras que con tanta desfachatez nos endilgan los medios electrónicos para hacernos creer que el desgobierno de Calderón trabaja "para vivir mejor" todos los mexicanos. Desde luego, los miembros del gobierno panista quisieran que hasta en la BBC se creyeran esas mentiras, de ahí su enojo tan desmedido que, por otra parte, duró apenas unas horas, las suficientes para que la opinión pública se diera cuenta de que existe en Londres un embajador mexicano y una cancillería que no sólo se preocupan por satisfacer los caprichos de la Casa Blanca.

La verdad es que México dejó de ser una nación respetable desde que se evidenció que la clase gobernante sólo está interesada en servirse del poder para medrar, no para velar por los intereses del país. Esto es inocultable a los ojos de la comunidad internacional, y si los gobiernos con los que tenemos relaciones se hacen como que no lo ven, es porque así les conviene. No en balde tienen todas las facilidades, para que sus connacionales hagan lo que les viene en gana en nuestro territorio, como es el caso de las empresas mineras canadienses y las españolas dedicadas a producir electricidad y competir con la Comisión Federal de Electricidad. Ni que decir de las estadunidenses, las cuales ven con más preocupación los avances que han tenido los españoles en el aparato productivo mexicano.

 

No hay comentarios.: