Julio Hernández López: Astillero
La más reciente de las argucias pinoleras pretende convencer auditivamente al respetable público votante de que los gobernadores priístas con los que Calderón mantuvo un trienio de entendimientos son tan malos que resultan preferibles los candidatos sucesorios propuestos por Los Pinos. Tres golpes de intercepción telefónica a sendos mandatarios impresentables con los que el felipismo negoció apoyo para que reconocieran y respaldaran el carácter cuando menos legal de la militarizada toma decembrina de 2006 de la silla presidencial. Cuando menos a dos de ellos, Ulises Ruiz y Mario Marín, el endeble Calderón devolvió el favor en forma de respaldo institucional que les salvara de las crisis derivadas de la represión a la APPO y la secuela del caso Lydia Cacho (al principio de lo que técnicamente se supone será un sexenio, FCH ni siquiera permitía ser fotografiado junto al presuntamente repudiado góber precioso, pero al paso de poco tiempo ya estaba sonriente y amable con quienes así acabaron siendo sus congéneres). Fidel Herrera, que se hizo de la gubernatura veracruzana por márgenes ínfimos de diferencia con el candidato blanquiazul y también en condiciones de fundada sospecha histórica de mapachería, mantuvo un largo pacto de ayuda mutua.
Pero ahora, los deplorables aliados del ayer, los puntales de la ilegítima presidencia felipista, son exhibidos en su esencia como si fuera novedad o como si los hubiera combatido política y judicialmente en momentos no electorales, utilizados los mecanismos federales de espionaje para una desesperada treta de última hora para tratar de cambiar las presuntas tendencias del voto que estarían en camino de dar otras sonoras cachetadas políticas a quien ya perdió ruidosamente en 2009 la cámara federal de diputados y desde entonces se mantiene en un marcado declive que en el fondo es una especie de consulta pública de opinión respecto al desempeño del atribulado Felipe en el ejercicio de lo que le va quedando de poder. Herrera usa el dinero público en promover a sus candidatos y partido de la misma manera que Felipe lo hace; Marín ejerce el poder en lo privado y en lo público de forma parecida (aunque, claro, con variantes) a como sucede en Los Pinos, y Ulises no es diferente en sus métodos de lo que a nivel nacional puede verse en materia de represión, retorcimiento, corrupción y obcecación electorera. La diferencia es que en este tramo del torneo de mañas extremas los tricolores les van ganando a los blanquiazules y por ello el fallido director técnico FC (iniciales que no significan Futbol Club) ha decidido apostar su raquítico pero envenenado resto para tratar de frenar a los adversarios acusándolos de lo mismo que durante años les toleró y aplaudió.
El resultado de los encubrimientos y posteriores develaciones en esas tres entidades carecería de importancia si se recuerda que los abanderados de Los Pinos para relevar a los priístas no están dotados para generar cambios reales sino sólo de apariencia, de bandos, de matices. Difícilmente se puede pensar que Miguel Ángel Yunes vaya a hacer un gobierno menos tramposo, corrupto y cínico que el de Fidel Herrera (aunque probablemente fuera más directamente represivo); Rafael Moreno Valle tal vez no se vea nunca envuelto en episodios de botellas de coñac y empresarios que lo consideren precioso, pero es un representante del elbismo saqueador, del panismo hipócrita y de los mismos intereses empresariales y de elites políticas que en Puebla apuestan en dos vías, aunque más cargados en realidad a la opción de la continuidad marinista mediante Javier López Zavala; y en Oaxaca difícilmente alguien será peor que Ulises Ruiz, aunque desde ahora Gabino Cué va tan cargado de compromisos con los grupos priístas locales de siempre (excepto la corriente ulisista, aislada ésta, embebida en el ejercicio despótico del poder), tan manejado y defendido por el calderonismo (lo cual necesariamente le ata), tan genérica su oferta, que su eventual llegada al gobierno oaxaqueño sería una pelea diaria de contratistas, prestamistas y financistas en demanda de pagos en especie en la ventanilla afligida e insuficiente del gabinismo socialmente insustancial.
CAMPO MARTE. Felipe Calderón encabezó una ceremonia donde recibió estandartes usados durante la guerra de Independencia. Ahí, el jefe del Ejecutivo dijo que en el país las libertades se ejercen a plenitudFoto Carlos Ramos Mamahua
En ese contexto, lo peor (sin importar los resultados electorales en sí) es el avance calderonista en la descalificación pública de lo político y la preparación mental para aplaudir el final de los procesos electorales carísimos e innecesarios, en cuanto puede verse que todo está podrido y mal manejado. El burro de 2006 hablando de orejas en 2010. De la ilegitimidad de origen a la ilegalidad y la ilegitimidad buscadas para no entregar lo mal habido. El Plan Colombia propuesto por el marine intelectual Castañeda para ser aplicado en México con presencia militar estadunidense también implicaría comicios patrióticamente adulterados e incluso, en caso de gran riesgo, la cancelación de esos procesos oportunamente satanizados. La gran mayoría de los gobernadores priístas (y no sólo los tres ya citados, pues el cártel de operaciones electorales está manejado por el mexiquense jefe Al CaPeNi) debería estar en la cárcel, entre otros delitos por los específicamente electorales, pero tampoco puede caerse en la trampa felipista de la convalidación del espionaje telefónico y su uso electoral. La guerra contra el narco sirvió para militarizar al país, abatir niveles de libertades, derechos y garantías y prepararse ante insurrecciones sociales previsibles. La guerra contra el dinosaurio de tres colores pretende convencer de que la política y lo electoral son innecesarios y que la única salvación posible está en los flancos del panismo o de cancelaciones o golpes de mano.
Y, mientras resulta que primero ha caído el rector del ITESM que los culpables de los asesinatos de estudiantes, ¡hasta mañana, con el gobierno de Nuevo León educando en secundarias para salvarse de las balaceras!
Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx
La más reciente de las argucias pinoleras pretende convencer auditivamente al respetable público votante de que los gobernadores priístas con los que Calderón mantuvo un trienio de entendimientos son tan malos que resultan preferibles los candidatos sucesorios propuestos por Los Pinos. Tres golpes de intercepción telefónica a sendos mandatarios impresentables con los que el felipismo negoció apoyo para que reconocieran y respaldaran el carácter cuando menos legal de la militarizada toma decembrina de 2006 de la silla presidencial. Cuando menos a dos de ellos, Ulises Ruiz y Mario Marín, el endeble Calderón devolvió el favor en forma de respaldo institucional que les salvara de las crisis derivadas de la represión a la APPO y la secuela del caso Lydia Cacho (al principio de lo que técnicamente se supone será un sexenio, FCH ni siquiera permitía ser fotografiado junto al presuntamente repudiado góber precioso, pero al paso de poco tiempo ya estaba sonriente y amable con quienes así acabaron siendo sus congéneres). Fidel Herrera, que se hizo de la gubernatura veracruzana por márgenes ínfimos de diferencia con el candidato blanquiazul y también en condiciones de fundada sospecha histórica de mapachería, mantuvo un largo pacto de ayuda mutua.
Pero ahora, los deplorables aliados del ayer, los puntales de la ilegítima presidencia felipista, son exhibidos en su esencia como si fuera novedad o como si los hubiera combatido política y judicialmente en momentos no electorales, utilizados los mecanismos federales de espionaje para una desesperada treta de última hora para tratar de cambiar las presuntas tendencias del voto que estarían en camino de dar otras sonoras cachetadas políticas a quien ya perdió ruidosamente en 2009 la cámara federal de diputados y desde entonces se mantiene en un marcado declive que en el fondo es una especie de consulta pública de opinión respecto al desempeño del atribulado Felipe en el ejercicio de lo que le va quedando de poder. Herrera usa el dinero público en promover a sus candidatos y partido de la misma manera que Felipe lo hace; Marín ejerce el poder en lo privado y en lo público de forma parecida (aunque, claro, con variantes) a como sucede en Los Pinos, y Ulises no es diferente en sus métodos de lo que a nivel nacional puede verse en materia de represión, retorcimiento, corrupción y obcecación electorera. La diferencia es que en este tramo del torneo de mañas extremas los tricolores les van ganando a los blanquiazules y por ello el fallido director técnico FC (iniciales que no significan Futbol Club) ha decidido apostar su raquítico pero envenenado resto para tratar de frenar a los adversarios acusándolos de lo mismo que durante años les toleró y aplaudió.
El resultado de los encubrimientos y posteriores develaciones en esas tres entidades carecería de importancia si se recuerda que los abanderados de Los Pinos para relevar a los priístas no están dotados para generar cambios reales sino sólo de apariencia, de bandos, de matices. Difícilmente se puede pensar que Miguel Ángel Yunes vaya a hacer un gobierno menos tramposo, corrupto y cínico que el de Fidel Herrera (aunque probablemente fuera más directamente represivo); Rafael Moreno Valle tal vez no se vea nunca envuelto en episodios de botellas de coñac y empresarios que lo consideren precioso, pero es un representante del elbismo saqueador, del panismo hipócrita y de los mismos intereses empresariales y de elites políticas que en Puebla apuestan en dos vías, aunque más cargados en realidad a la opción de la continuidad marinista mediante Javier López Zavala; y en Oaxaca difícilmente alguien será peor que Ulises Ruiz, aunque desde ahora Gabino Cué va tan cargado de compromisos con los grupos priístas locales de siempre (excepto la corriente ulisista, aislada ésta, embebida en el ejercicio despótico del poder), tan manejado y defendido por el calderonismo (lo cual necesariamente le ata), tan genérica su oferta, que su eventual llegada al gobierno oaxaqueño sería una pelea diaria de contratistas, prestamistas y financistas en demanda de pagos en especie en la ventanilla afligida e insuficiente del gabinismo socialmente insustancial.
CAMPO MARTE. Felipe Calderón encabezó una ceremonia donde recibió estandartes usados durante la guerra de Independencia. Ahí, el jefe del Ejecutivo dijo que en el país las libertades se ejercen a plenitudFoto Carlos Ramos Mamahua
En ese contexto, lo peor (sin importar los resultados electorales en sí) es el avance calderonista en la descalificación pública de lo político y la preparación mental para aplaudir el final de los procesos electorales carísimos e innecesarios, en cuanto puede verse que todo está podrido y mal manejado. El burro de 2006 hablando de orejas en 2010. De la ilegitimidad de origen a la ilegalidad y la ilegitimidad buscadas para no entregar lo mal habido. El Plan Colombia propuesto por el marine intelectual Castañeda para ser aplicado en México con presencia militar estadunidense también implicaría comicios patrióticamente adulterados e incluso, en caso de gran riesgo, la cancelación de esos procesos oportunamente satanizados. La gran mayoría de los gobernadores priístas (y no sólo los tres ya citados, pues el cártel de operaciones electorales está manejado por el mexiquense jefe Al CaPeNi) debería estar en la cárcel, entre otros delitos por los específicamente electorales, pero tampoco puede caerse en la trampa felipista de la convalidación del espionaje telefónico y su uso electoral. La guerra contra el narco sirvió para militarizar al país, abatir niveles de libertades, derechos y garantías y prepararse ante insurrecciones sociales previsibles. La guerra contra el dinosaurio de tres colores pretende convencer de que la política y lo electoral son innecesarios y que la única salvación posible está en los flancos del panismo o de cancelaciones o golpes de mano.
Y, mientras resulta que primero ha caído el rector del ITESM que los culpables de los asesinatos de estudiantes, ¡hasta mañana, con el gobierno de Nuevo León educando en secundarias para salvarse de las balaceras!
Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx
La madrugada del 19 de marzo de este año dos estudiantes de posgrado con calificaciones de excelencia fueron asesinados a las puertas del Tec de Monterrey en una refriega entre soldados y presuntos narcos. El rector, Rafael Rangel Sostmann, primero negó que pertenecieran a la comunidad universitaria, luego hubo de admitirlo. Su respuesta fue un llamado a sentarse a reflexionar sobre el suceso, cuando estudiantes y maestros querían salir a la calle a manifestar su indignación. Producto de la reflexión es un documento que presentó al presidente Calderón y nadie sabe en cuál cajón está olvidado. El presidente del consejo directivo del Tec, Lorenzo Zambrano, anunció ayer la renuncia del rector. Permaneció 25 años en su cargo, con excepción de un breve periodo en que se incorporó al equipo de Vicente Fox.
Samsung, BlackBerry, iPhone
¿Refleja la personalidad de su dueño la marca de su celular? No tanto, pero desde luego, sí da una idea de su actividad. BlackBerry tiene como clientes a ejecutivos de empresa y políticos. Obama no quiso desprenderse del suyo y el servicio secreto desarrolló un software para protegerlo de los espías. Samsung quiere competir en ese segmento del mercado, muy rentable, y anuncia un celular con pantalla táctil que se parece mucho a los BlackBerry. Otro rival, el iPhone, de Steve Jobs, está lanzando una nueva versión de su teléfono inteligente.
Samsung, BlackBerry, iPhone
¿Refleja la personalidad de su dueño la marca de su celular? No tanto, pero desde luego, sí da una idea de su actividad. BlackBerry tiene como clientes a ejecutivos de empresa y políticos. Obama no quiso desprenderse del suyo y el servicio secreto desarrolló un software para protegerlo de los espías. Samsung quiere competir en ese segmento del mercado, muy rentable, y anuncia un celular con pantalla táctil que se parece mucho a los BlackBerry. Otro rival, el iPhone, de Steve Jobs, está lanzando una nueva versión de su teléfono inteligente.
Carlos Fernández-Vega: México SA
cómo no recordar aquella multimillonaria cuan machacona campaña propagandística del tesoro en aguas profundas. En febrero de 2008, como parte del cabildeo oficial en pos de una reforma energética (en realidad un pretexto para abrir la puerta trasera a la participación trasnacional en el negocio, amén del gasolinazo recetado a los consumidores) a toda hora se escuchaba (con esa voz engolosinada y patriotera en off) aquello de que “México tiene un gran tesoro, un tesoro escondido debajo del fondo del mar… el petróleo es nuestro tesoro y es una riqueza inmensa que pertenece a todos los mexicanos de hoy y mañana… allí está nuestro tesoro y debemos llegar a él… Debemos ir en busca de nuestro tesoro…. Nos permitirá vivir mejor…”. ¿Recuerdan?
Pues bien, resulta que un par de años después el tal tesoro ya no es prioridad para el gobierno federal, porque “hay un cambio en la jerarquización de los proyectos y se va a trabajar más en las cuencas del sur-sureste en aguas someras para ir ampliando la frontera exploratoria. Si bien el programa de aguas profundas permanece en Pemex, yo diría que ahora ya no es un tema prioritario… el derrame petrolero (de la British Petroleum en el Golfo de México) ha sido demasiado traumático para la industria, por lo que los proyectos se van a cancelar en los próximos 10 años (…) para que los proyectos (en aguas profundas) sean rentables tendríamos que tener precios promedio en los próximos años, de entre 80 y 90 dólares por barril como piso, con el propósito de que incursionar en aguas profundas fuera un proyecto rentable” (Fluvio Ruiz y Carlos Huerta, consejero profesional y asesor del consejo de administración de Pemex, respectivamente, en nota de Israel Rodríguez, La Jornada).
Qué tristeza. Tanta ilusión con el tesoro enterrado, para que ahora salgan con que siempre no, que los piratas mejor se quedan con el esquema tradicional, es decir, que la Secretaría de Hacienda mantenga en el filo de la navaja a las finanzas de Petróleos Mexicanos –exprime que exprime recursos–, sin mayores inversiones y dependientes de un mercado, lo que tarde que temprano hundirá a la paraestatal, mientras otras petroleras latinoamericanas manejan proyectos multimillonarios de expansión (refinerías incluidas).
Todo indica que el derrame en el Golfo de México cayó como anillo al dedo (léase pretexto) para anunciar que se deja el tesoro para mejor ocasión. Sin embargo, un reporte aparecido en La Jornada (Israel Rodríguez) el pasado 9 de mayo aporta elementos más sólidos sobre el por qué ya no es prioridad: Petróleos Mexicanos sigue sin encontrar el tesoro en aguas profundas del Golfo de México pese a que ha invertido un monto total de 16 mil 798.5 millones de pesos en estudios y en la perforación de 14 pozos, de los cuales 13 han resultado secos y uno ha sido productor de gas. El argumento utilizado para impulsar la reforma petrolera de 2008 y de esta manera permitir la participación de empresas petroleras internacionales en la exploración y explotación de crudo en aguas profundas, fue que existe en el Golfo de México un tesoro equivalente a 29 mil 500 millones de barriles de petróleo crudo equivalente, volumen que representa 54.8 por ciento de un total de recursos prospectivos de 53 mil 800 millones de barriles de petróleo.
De acuerdo con la propaganda oficial, el valor bruto probable del tesoro, a 30 años, sería de entre 850 mil millones y un billón 500 mil millones de dólares, pero de acuerdo con informes obtenidos mediante el Instituto Federal de Acceso a la Información Pública sólo se han encontrado reservas probadas en el pozo Lakach-1 por 308 mil millones de pies cúbicos de gas. Carlos Morales, director general de PEP, informó que en junio próximo llegará un equipo para perforar en tirante de agua superior a 500 metros de profundidad y en octubre llegará otro equipo con capacidad de perforar en profundidades de 10 mil pies para iniciar la exploración en el área de Perdido con el pozo Maximino (Idem). Entonces, gastados alrededor de mil 500 millones de dólares y sólo encontraron gas, no crudo, y a la primera de cambios congelan la decisión (cuando menos en la propaganda así lo anunciaban) de ir por el tesoro profundo. A la primera se rajan, mientras Hacienda no deja de exprimir a la paraestatal y ésta cancela o pospone proyectos.
En cambio, ayer mismo la brasileña Petrobras anunció un incremento de 29 por ciento en su plan de inversiones para los próximos cinco años, destinado a desarrollar una de las mayores reservas petroleras mundiales en aguas profundas. Destinará alrededor de 224 mil millones de dólares (2010-2014) para el desarrollo de reservas, pese al derrame en el Golfo de México, e incluye un creciente presupuesto para la construcción de refinerías con miras a satisfacer la demanda interna y, desde luego, fortalecer y desarrollar su economía. Ninguna otra compañía en la industria tiene un programa como el de Petrobras para impulsar su producción de petróleo y gas, declaró el presidente ejecutivo de la firma, José S. Gabrielli, quien detalló que 33 por ciento de dichos recursos se canalizarán a refinación, transporte y promoción, y 53 por ciento a producción (el resto corresponde a gastos de operación). Se estima que la producción de crudo en Brasil pase de 2.1 millones de barriles diarios en el presente año a 3.95 millones en 2020, cuando Pemex –de acuerdo con lo señalado líneas arriba, y en el mejor de los casos– retome los proyectos en aguas profundas (léase el multicitado tesoro).
Ecuador, otra nación petrolera latinoamericana, anunció la construcción de una refinería mediante la inversión de 12 mil millones de dólares (la más grande del país, según el presidente Rafael Correa) y busca asociarse con capitales coreanos; en Venezuela, la inyección de recursos en este sector se fortalece y salpica a otras naciones de la región; el gobierno cubano se ha asociado con petroleras trasnacionales para encontrar su propio tesoro, e inauguró, en coinversión con PDVSA, la refinería en Cienfuegos.
¿Y dónde quedó Pemex, la gran empresa del Estado y envidia de América Latina?
Las rebanadas del pastel
Uruguay y México nunca se han enfrentado militarmente, tampoco se registran invasiones, ni batallas históricas que rememorar; de siempre existe una profunda querencia entre ambos pueblos, que se abrazan. Entonces, a la hora del resultado futbolero de hoy, ¿qué pendejada se les ocurrirá a los políticos nacionales que confunden historia con histeria, como en el caso del México-Francia de la semana pasada?
cfvmexico_sa@hotmail.com - mexicosa@infinitum.com.mx
Cristina Barros y Marco Buenrostro: Itacate
Hacer queso es un método de conservación difundido en muchos lugares del mundo. El queso puede ser de leche de vaca, de borrego, de cabra y de otros animales que la producen.
Para hacer queso se requiere de un agente que interactúe con la caseína que contiene la leche en altas cantidades. Puede ser cuajo, un ácido como el ácido cítrico o cultivos lácticos que son cepas de bacterias como la Lactococcus lactis, que no sólo contribuyen a la fermentación, sino que confieren al queso sabores y olores determinados, así como distintos grados de conservación.
Las condiciones culturales y del medio ambiente influyen en el tipo de queso que cada cultura produce. En la producción de queso artesanal se pueden controlar muchos factores, sin embargo hay otros que no dependen del hombre como ocurre con el tipo de pastos con los que se alimenta el ganado.
Martín y Bryan: respuesta necesaria
El pasado 3 de abril, en la carretera que va de Reynosa a Nuevo Laredo, a la altura de Ciudad Mier, en Tamaulipas, efectivos del Ejército atacaron con armas largas y granadas el vehículo en el que viajaban los integrantes de la familia Almanza Salazar. En la acción murieron los niños Bryan y Martín y resultaron heridos sus padres, Martín Almanza Rodríguez y Cinthia Salazar Castillo, y un adulto más.
Continuar
El Correo Ilustrado
La huelga del SME es por todos, afirman
¿Qué tiene que ver la sociedad con la huelga de hambre de los trabajadores del SME? ¿Son ajenos y distantes, o forman parte de un problema común moral, social y político? La cancelación de los derechos de una sola persona debería preocupar a todos, pero si se trata de cancelación de la garantía de 44 mil ciudadanos que fueron echados a la calle y de 22 mil jubilados cuyo futuro ahora es incierto, pensamos que el problema es nacional y de todos; que en la suerte de ellos va, sin duda, la nuestra.
Continuar
Jorge Carrillo Olea: ¡Salvemos lo imprescindible!
En cualquier naufragio se oye gritar, ¡Mujeres y niños primero! Lo que simplemente significa que hay una clara identificación del deber moral más alto, lo imprescindible. Lo demás por valioso que sea será siempre secundario. Así, los meses corren y para muchos programas o simples intenciones, el tiempo de Calderón se agota. De no iniciar o acelerar ciertas decisiones, a éstas el tiempo perdido las revocará.
Continuar
Magdalena Gómez: Atenco: legalidad y justicia, ¿agua y aceite?
Y sigue la Suprema Corte dando de que mal hablar, su resultado de la investigación sobre la guardería ABC sólo dejó satisfechos a quienes de suyo tienen responsabilidad por sus acciones u omisiones en el ejercicio de un cargo público. Ni siquiera la renuncia ha estado dentro de sus opciones. ¿Tendrán conciencia las ministras y los ministros de que la sociedad los observa como en una vitrina desde donde debaten y se retratan con cada argumento que expresan? Ciertamente, la sociedad no conoce de tecnicismos jurídicos pero sí tiene sentido de justicia y sabe que si murieron niñas y niños en una guardería debido a un incendio, ahí existen responsabilidades que deben ser castigadas. Pero la Corte no está para eso, prefiere respetar su interpretación literal del artículo 97 constitucional y señalar incluso que eso de investigar violaciones graves de derechos humanos es muy conflictivo que mejor le supriman esa responsabilidad. No entra en su estrecho horizonte solicitar al Congreso que le amplíe las facultades. En el fondo está la convicción de que las violaciones de derechos humanos las cometen desde los poderes del Estado y eso de castigar a gobernadores o a secretarios de Estado no le resulta sencillo, por decir lo menos.
Continuar
Marco Rascón: Iniciativa México: Teletón ideológico
Bajo el espíritu del Chapulín Colorado y la pregunta nacional ¡Oh! ¿Y ahora, quién vendrá a defendernos? y en el marco del zumbido de las vuvuzelas, el oligopolio mediático, o llamados poderes fácticos, nos ha regalado la solución nacional gracias al gran vacío de gobierno existente: 6 millones en premios, el equivalente a minuto y medio del precio de tres espots de un partido de la Selección Nacional en el actual Mundial de Futbol en Sudáfrica.
Continuar
José Blanco: Monsi, el señor de la risa
El torrente de virtudes sin fin, la bondad humana personificada en su modo de ver el mundo, la austeridad como modo de vida, la honradez intelectual a toda prueba, la integridad moral como de roca, el respeto medroso que sus peores enemigos le tienen y le continuarán teniendo, el inmenso cariño y simpatía de tantos intelectuales mexicanos y extranjeros, la amistad, el apego y hasta la devoción que le guardan grandes franjas del pueblo mexicano, lo hicieron un ser irrepetible.
Continuar
Luis Hernández Navarro: Esquina bajan: Monsiváis y la izquierda mexicana
Durante más de 50 años, Carlos Monsiváis fue un actor central de la izquierda mexicana. Sus crónicas, ensayos, reflexiones críticas y proyectos fueron muy relevantes en la construcción de un campo político-cultural afín a ella. Su participación en esta corriente comienza con su juventud.
Continuar
Pedro Miguel: Optimismo
De cuerpo presente, sin necesidad de mover un músculo ni de musitar una palabra, Monsiváis dio a la gente la oportunidad de anotarse una victoria sobre el poder oligárquico: este domingo el jefe nominal de las instituciones federales no pudo ni acercarse al Palacio de Bellas Artes y mucho menos presidir el homenaje al fallecido, así fuera ingresando al recinto por la puerta de atrás, como especuló, con motivos, alguien del personal del INBA citado en la nota de ayer de Mónica Mateos-Vega y Fabiola Palapa. En el más emblemático recinto cultural, los dueños actuales del poder fueron los apestados del evento. En cambio, López Obrador, el hombre más odiado por el régimen oligárquico, fue recibido con aplausos por la gente. Pero a Calderón no hubo que hacerle explícita la prohibición popular; simplemente, no tenía la menor posibilidad de estar allí.
Continuar
Los embarazos no deseados constituyen un tema de gran preocupación para los sistemas de salud pública de todo el mundo. Por su asociación con tasas elevadas de mortalidad de mujeres representan un problema especialmente grave en las naciones en desarrollo. La anticoncepción de emergencia es una herramienta de gran importancia para enfrentarlo. En los años recientes se ha producido una evolución en este campo, con el surgimiento de nuevos fármacos que brindan protección por lapsos de tiempo mayores a los que ofrece el levonorgestrel, principio activo de la llamada píldora del día siguiente.
Continuar
Continuar
Dadas las cronologías yo tengo recuerdos tempranos de Carlos Monsiváis. El más antiguo está referido al programa radiofónico Los niños catedráticos transmitido semanalmente por la XEQ, si mal no recuerdo.
Continuar
Continuar
Rafael Barajas El Fisgón: De cómo confundir al mundo diciendo la verdad
Estaba yo sin saber qué escribir sobre Carlos Monsiváis cuando se me apareció un beato cristero que está en proceso de ser santificado por el Vaticano y me contó esta historia que trata de un engendro del demonio. Todo parecido con el Catecismo para indios remisos es un mero homenaje.
Cansado de que a los círculos del infierno llegaran solamente ánimas arrepentidas, un mal día, Luzbel decidió inventar un engaño supremo y, tras baterías de encuestas, costosas asesorías con Dick Morris y Antonio Solá, seminarios con expertos del CIDE y reuniones con grupos focales, perfeccionó su engendro.
El fruto de sus desvelos resultó peor de lo que esperaba: era más puro que la vida íntima del padre Maciel, más púdico que la declaración de impuestos de Roberto Hernández, más cristiano que un narco absuelto por un nuncio papal, más puro que un gramo de cocaína vendido por un judicial, más limpio que un operativo antinarco; tenía tanto rating como una novela en horario triple A y, por último, estaba imbuido en una fe religiosa tan ardiente que era un ateo radical.
Ricardo Rocha
Detrás de la Noticia
22 de junio de 2010
Saramago y los niños
“Baja el niño la montaña, Atraviesa el mundo todo, Llega al gran río Nilo, En el hueco de las manos recoge cuanta agua le cabía. Vuelve a atravesar el mundo Por la pendiente se arrastra, Tres gotas que llegaron, Se las bebió la flor sedienta. Veinte veces de aquí allí, Cien mil viajes a la Luna, La sangre en los pies descalzos, Pero la flor erguida Ya daba perfume al aire, Y como si fuese un roble Ponía sombra en el suelo”.
Es el verso central de “La flor más grande del mundo”, uno de los cuentos infantiles que José escribió y en el que relata la pequeña historia de un niño que descubre una flor marchita al borde de la muerte y recorre el mundo para traerle unas gotas hasta caer exhausto. Las últimas líneas son conmovedoras porque se refieren a la búsqueda de padres y vecinos del niño desaparecido: “Lo recorrieron todo, desatados en lágrimas y era casi la puesta de sol cuando levantaron los ojos y vieron a lo lejos una flor enorme que nadie recordaba que estuviera allí. Fueron todos corriendo, subieron la colina y se encontraron con el niño que dormía. Sobre él, resguardándolo del fresco de la tarde, se extendía un gran pétalo perfumado, con todos los colores del arco iris”.
Por eso digo que otros se ocupen con sapiencia de lo que José Saramago nos heredó a los adultos. Hoy yo prefiero recordarlo con esa sensibilidad a flor de piel que dedicó a los niños y que tal vez es su faceta desconocida para muchos. Pero que a mí me consta de la más bella manera. Y es que conociéndolo y admirándolo desde siempre, desde antes del Nobel, tuve no sólo el privilegio de su amistad fraterna sino el de testimoniar el crecimiento de su cariño por mi propia flor llamada Alejandra, desde su nacimiento; luego, tomando su pequeña mano para escribir juntos algo muy bello a manera de dedicatoria dulcísima. Y alguna vez aquellas lágrimas y su conmoción insólita al descubrir la letra de “Las mañanitas” en una tarde de guitarras en casa junto a Pilar, Marianela, Sabina y Miguel Ríos.
Por todo ello, su infinito amor a los seres humanos, pero sobre todo hacia los niños, qué bueno que José no llegó a enterarse de un país en que los responsables de la muerte inimaginable de 49 pequeños han quedado impunes porque los ministros involucrados con la justicia se aliaron al poder. Y de que en ese mismo país, su gobierno menosprecia la verdad de una madre que vio y sintió a su hijo morir en sus brazos por las balas de los soldados, que ahora son defendidos hasta la náusea —y como esbirros que son— por quienes los mandan.
Esos tan lejanos a “La flor más grande del mundo”.
Saramago y los niños
“Baja el niño la montaña, Atraviesa el mundo todo, Llega al gran río Nilo, En el hueco de las manos recoge cuanta agua le cabía. Vuelve a atravesar el mundo Por la pendiente se arrastra, Tres gotas que llegaron, Se las bebió la flor sedienta. Veinte veces de aquí allí, Cien mil viajes a la Luna, La sangre en los pies descalzos, Pero la flor erguida Ya daba perfume al aire, Y como si fuese un roble Ponía sombra en el suelo”.
Es el verso central de “La flor más grande del mundo”, uno de los cuentos infantiles que José escribió y en el que relata la pequeña historia de un niño que descubre una flor marchita al borde de la muerte y recorre el mundo para traerle unas gotas hasta caer exhausto. Las últimas líneas son conmovedoras porque se refieren a la búsqueda de padres y vecinos del niño desaparecido: “Lo recorrieron todo, desatados en lágrimas y era casi la puesta de sol cuando levantaron los ojos y vieron a lo lejos una flor enorme que nadie recordaba que estuviera allí. Fueron todos corriendo, subieron la colina y se encontraron con el niño que dormía. Sobre él, resguardándolo del fresco de la tarde, se extendía un gran pétalo perfumado, con todos los colores del arco iris”.
Por eso digo que otros se ocupen con sapiencia de lo que José Saramago nos heredó a los adultos. Hoy yo prefiero recordarlo con esa sensibilidad a flor de piel que dedicó a los niños y que tal vez es su faceta desconocida para muchos. Pero que a mí me consta de la más bella manera. Y es que conociéndolo y admirándolo desde siempre, desde antes del Nobel, tuve no sólo el privilegio de su amistad fraterna sino el de testimoniar el crecimiento de su cariño por mi propia flor llamada Alejandra, desde su nacimiento; luego, tomando su pequeña mano para escribir juntos algo muy bello a manera de dedicatoria dulcísima. Y alguna vez aquellas lágrimas y su conmoción insólita al descubrir la letra de “Las mañanitas” en una tarde de guitarras en casa junto a Pilar, Marianela, Sabina y Miguel Ríos.
Por todo ello, su infinito amor a los seres humanos, pero sobre todo hacia los niños, qué bueno que José no llegó a enterarse de un país en que los responsables de la muerte inimaginable de 49 pequeños han quedado impunes porque los ministros involucrados con la justicia se aliaron al poder. Y de que en ese mismo país, su gobierno menosprecia la verdad de una madre que vio y sintió a su hijo morir en sus brazos por las balas de los soldados, que ahora son defendidos hasta la náusea —y como esbirros que son— por quienes los mandan.
Esos tan lejanos a “La flor más grande del mundo”.
Alberto Aziz Nassif
¡Aquí se imparte justicia!
En memoria de Carlos Monsiváis
Tal como se esperaba, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) decidió, en votaciones divididas, que las facultades del artículo 97 de la Constitución son limitadas y sólo los autorizan para llegar a señalar que hubo violaciones graves, pero que no hay responsables, simplemente hay involucrados. Después de un dictamen que fincó responsabilidad en tres niveles de gobierno, que estableció faltas específicas y concretas, una mayoría de ministros estableció que no existe un desorden generalizado en el sistema de guarderías, a pesar de que los números de una investigación exhaustiva digan lo contrario, sólo el 0.3% cumplía con todos los requisitos.
Se destiñe la justicia, sólo nos quedamos con funcionarios involucrados en graves violaciones de derechos humanos, pero sin ningún tipo de responsabilidad. A pesar de que el dictamen estableció responsabilidades específicas que apuntaron hacia los mandos superiores, tampoco logró la mayoría; sólo hubo personas involucradas, pero de niveles medios y bajos. El grupo de padres de familia que ha formado el movimiento 5 de Junio tiene un año en la búsqueda de justicia, pero no ha logrado prácticamente nada. Nadie es responsable de la muerte de sus hijos, ni de las gravísimas quemaduras de los que sobrevivieron, nadie ha pisado la cárcel.
Las instancias de procuración e impartición de justicia no hacen su trabajo y lo único que queda es que el máximo tribunal se haga cargo, pero sus facultades son extremadamente limitadas, y además hay una mayoría de sus integrantes que no quiere cambiar las cosas y entrar al fondo de lo que implican estos procesos de investigación. Por eso tenemos un resultado extraño, paradójico: dictámenes que afirman que sí se violó el derecho a la vida, pero nadie resulta responsable, sólo hay involucrados y, como con el caso de Atenco, se señala sólo a los niveles medios y bajos de la toma de decisiones. En otros casos el problema ha sido calificar si la violación fue grave o se quedó en una simple violación con minúsculas, como sucedió con el expediente de Lydia Cacho.
El mundo de la justicia en México resulta complicado, es una maraña plagada de intereses, influencias y visiones dominantes sumamente conservadoras. Los padres de familia sólo tienen un puñado de involucrados de niveles medios y nadie es responsable, eso es todo lo que han logrado después de un año. La facultad de investigación del artículo 97 es un extraño animal, único, raro y propiciador de tensiones jurídicas. Algunas voces han señalado que sería mejor desaparecerlo y, como lo votó el Senado hace unos meses, trasladar la facultad a la Comisión Nacional de Derechos Humanos. Otras opiniones indican que no es conveniente mover esta facultad porque las decisiones y dictámenes de la SCJN tienen un peso relevante y una gran importancia porque se trata de la cabeza del Poder Judicial. Así que a pesar de que el resultado de esta facultad no sea vinculatorio, el procesamiento de los casos puede representar un equilibrio ante el deficiente sistema de justicia que existe en México. Por lo menos queda la condena social y la crítica de la opinión pública.
Si comparamos lo que sucedió con la Guardería ABC y el caso de los dos niños, Martín y Bryan Almanza, de cinco y nueve años, asesinados en un retén militar en Tamaulipas, se puede observar el impacto que han tenido dos instituciones. En el segundo caso la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) dio a conocer una investigación que contradice la versión oficial del gobierno y establece responsabilidad directa a personal del Tercer Regimiento Blindado de la Secretaría de la Defensa Nacional. La CNDH emite recomendaciones cuando hay violación de derechos humanos. Este mecanismo tampoco es vinculatorio, se trabaja sobre un marco de responsabilidad moral y ética, y la fuerza de la recomendación depende de la fuerza moral que tenga socialmente el defensor de los derechos y, por supuesto, de la sensibilidad de la parte gubernamental para seguir la recomendación. Vamos a ver si Felipe Calderón modifica su versión y pide una disculpa porque dijo que le demostraran un solo caso. Por lo pronto, el gobierno ya empezó a descalificar la recomendación de la CNDH.
En suma, dicen que en México se imparte justicia, pero nos quedamos con dos instituciones, dos procedimientos, mucho discurso legal, pero muy poca justicia. Los dos casos nos muestran, de forma simultánea, las limitadas capacidades y el severo déficit de justicia que padecen las instituciones del Estado mexicano. Sin duda, el debate sobre la justicia necesita respuestas urgentes, que no se ven por ningún lado…
Investigador del CIESAS
Tal como se esperaba, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) decidió, en votaciones divididas, que las facultades del artículo 97 de la Constitución son limitadas y sólo los autorizan para llegar a señalar que hubo violaciones graves, pero que no hay responsables, simplemente hay involucrados. Después de un dictamen que fincó responsabilidad en tres niveles de gobierno, que estableció faltas específicas y concretas, una mayoría de ministros estableció que no existe un desorden generalizado en el sistema de guarderías, a pesar de que los números de una investigación exhaustiva digan lo contrario, sólo el 0.3% cumplía con todos los requisitos.
Se destiñe la justicia, sólo nos quedamos con funcionarios involucrados en graves violaciones de derechos humanos, pero sin ningún tipo de responsabilidad. A pesar de que el dictamen estableció responsabilidades específicas que apuntaron hacia los mandos superiores, tampoco logró la mayoría; sólo hubo personas involucradas, pero de niveles medios y bajos. El grupo de padres de familia que ha formado el movimiento 5 de Junio tiene un año en la búsqueda de justicia, pero no ha logrado prácticamente nada. Nadie es responsable de la muerte de sus hijos, ni de las gravísimas quemaduras de los que sobrevivieron, nadie ha pisado la cárcel.
Las instancias de procuración e impartición de justicia no hacen su trabajo y lo único que queda es que el máximo tribunal se haga cargo, pero sus facultades son extremadamente limitadas, y además hay una mayoría de sus integrantes que no quiere cambiar las cosas y entrar al fondo de lo que implican estos procesos de investigación. Por eso tenemos un resultado extraño, paradójico: dictámenes que afirman que sí se violó el derecho a la vida, pero nadie resulta responsable, sólo hay involucrados y, como con el caso de Atenco, se señala sólo a los niveles medios y bajos de la toma de decisiones. En otros casos el problema ha sido calificar si la violación fue grave o se quedó en una simple violación con minúsculas, como sucedió con el expediente de Lydia Cacho.
El mundo de la justicia en México resulta complicado, es una maraña plagada de intereses, influencias y visiones dominantes sumamente conservadoras. Los padres de familia sólo tienen un puñado de involucrados de niveles medios y nadie es responsable, eso es todo lo que han logrado después de un año. La facultad de investigación del artículo 97 es un extraño animal, único, raro y propiciador de tensiones jurídicas. Algunas voces han señalado que sería mejor desaparecerlo y, como lo votó el Senado hace unos meses, trasladar la facultad a la Comisión Nacional de Derechos Humanos. Otras opiniones indican que no es conveniente mover esta facultad porque las decisiones y dictámenes de la SCJN tienen un peso relevante y una gran importancia porque se trata de la cabeza del Poder Judicial. Así que a pesar de que el resultado de esta facultad no sea vinculatorio, el procesamiento de los casos puede representar un equilibrio ante el deficiente sistema de justicia que existe en México. Por lo menos queda la condena social y la crítica de la opinión pública.
Si comparamos lo que sucedió con la Guardería ABC y el caso de los dos niños, Martín y Bryan Almanza, de cinco y nueve años, asesinados en un retén militar en Tamaulipas, se puede observar el impacto que han tenido dos instituciones. En el segundo caso la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) dio a conocer una investigación que contradice la versión oficial del gobierno y establece responsabilidad directa a personal del Tercer Regimiento Blindado de la Secretaría de la Defensa Nacional. La CNDH emite recomendaciones cuando hay violación de derechos humanos. Este mecanismo tampoco es vinculatorio, se trabaja sobre un marco de responsabilidad moral y ética, y la fuerza de la recomendación depende de la fuerza moral que tenga socialmente el defensor de los derechos y, por supuesto, de la sensibilidad de la parte gubernamental para seguir la recomendación. Vamos a ver si Felipe Calderón modifica su versión y pide una disculpa porque dijo que le demostraran un solo caso. Por lo pronto, el gobierno ya empezó a descalificar la recomendación de la CNDH.
En suma, dicen que en México se imparte justicia, pero nos quedamos con dos instituciones, dos procedimientos, mucho discurso legal, pero muy poca justicia. Los dos casos nos muestran, de forma simultánea, las limitadas capacidades y el severo déficit de justicia que padecen las instituciones del Estado mexicano. Sin duda, el debate sobre la justicia necesita respuestas urgentes, que no se ven por ningún lado…
Investigador del CIESAS
Alejandro Encinas Rodríguez
Qué te vaya bonito
Carlos Monsiváis ha muerto y su ausencia nos deja una sensación de desamparo. A lo largo de una y cruel agonía, extrañamos sus agudos comentarios y críticas a los hombres del poder y el dinero. Cuánta falta hicieron sus análisis respecto a la cursi y conservadora Iniciativa México, que pretende restaurar la credibilidad y proteger el interés de los poderes fácticos; su posición frente a la impunidad y corrupción con que fue entregada la red de fibra óptica de la CFE a Televisa y Telefónica; la resolución de la SCJN sobre la guardería ABC; la ocupación de la fuerzas federales de la mina en Cananea; el caciquismo en San Juan Copala; el día más violento del año y sus 85 ejecuciones, o el descaro de Fidel Herrera y lo que el llama su “poder absoluto”. Ahora su ausencia será permanente.
Conocí —es un decir— a Monsiváis desde niño, en los años sesenta, a través del sabio Monsi, cuando Tsekub Baloyán descendía en un batiscafo para salvar a Chanoc, su novia Irina y al sabio Monsiváis, de la furia de un calamar gigante para lo que tuvo que ocupar un rayo láser, regañando al joven sabio: “no chille sabio, todo fue culpa del robot que diseñó usted para enviarlo a Marte”, a lo que Monsi respondió: ¿y quién le dio Cañabar?, el crudo aguardiente que libaban en el “Perico marinero” prestigiada cantina del pueblo de Ixtac. Así lo seguí, al lado de Chanoc y de Tsekub en su lucha contra las fuerzas del mal, y en diversas andanzas, incluidos viajes al espacio sideral.
Después del 68, en la preparatoria y la facultad, comprendí el porqué de la buena fama de la inteligencia y basta memoria de el sabio Monsi, plasmada en la historieta concebida por Martín de Lucenay, Pedro Zapiain Fernández y Conrado de la Torre, y la gráfica de Ángel Mora, pues sus ideas y escritos se convirtieron en un referente imprescindible para mi generación, que encontró en Carlos Monsiváis, además de una incuestionable visión crítica de la realidad mexicana, a un verdadero agitador de conciencias.
Más adelante, los militantes de izquierda encontramos en Carlos Monsiváis a un crítico implacable del poder y de las burocracias autoritarias de todo signo, y en la gestión pública, en distintos momentos de nuestras primeras experiencias de gobierno desde la izquierda, y en especial en la Jefatura de Gobierno del Distrito Federal, en el momento más difícil en la historia reciente del país, tras el fraude electoral de 2006, al borde de una ruptura social, nos brindó su amistad y solidaridad.
Monsiváis acaba de partir y ya nos hace falta. Solamente espero, al igual que muchos mexicanos y mexicanas, que como dice el viejo bolero ranchero: “Ojalá que te vaya bonito” donde quiera te encuentres.
alejandro.encinas@congreso.gob.mx
Coordinador de los Diputados Federales del Partido de la Revolución Democrática
Conocí —es un decir— a Monsiváis desde niño, en los años sesenta, a través del sabio Monsi, cuando Tsekub Baloyán descendía en un batiscafo para salvar a Chanoc, su novia Irina y al sabio Monsiváis, de la furia de un calamar gigante para lo que tuvo que ocupar un rayo láser, regañando al joven sabio: “no chille sabio, todo fue culpa del robot que diseñó usted para enviarlo a Marte”, a lo que Monsi respondió: ¿y quién le dio Cañabar?, el crudo aguardiente que libaban en el “Perico marinero” prestigiada cantina del pueblo de Ixtac. Así lo seguí, al lado de Chanoc y de Tsekub en su lucha contra las fuerzas del mal, y en diversas andanzas, incluidos viajes al espacio sideral.
Después del 68, en la preparatoria y la facultad, comprendí el porqué de la buena fama de la inteligencia y basta memoria de el sabio Monsi, plasmada en la historieta concebida por Martín de Lucenay, Pedro Zapiain Fernández y Conrado de la Torre, y la gráfica de Ángel Mora, pues sus ideas y escritos se convirtieron en un referente imprescindible para mi generación, que encontró en Carlos Monsiváis, además de una incuestionable visión crítica de la realidad mexicana, a un verdadero agitador de conciencias.
Más adelante, los militantes de izquierda encontramos en Carlos Monsiváis a un crítico implacable del poder y de las burocracias autoritarias de todo signo, y en la gestión pública, en distintos momentos de nuestras primeras experiencias de gobierno desde la izquierda, y en especial en la Jefatura de Gobierno del Distrito Federal, en el momento más difícil en la historia reciente del país, tras el fraude electoral de 2006, al borde de una ruptura social, nos brindó su amistad y solidaridad.
Monsiváis acaba de partir y ya nos hace falta. Solamente espero, al igual que muchos mexicanos y mexicanas, que como dice el viejo bolero ranchero: “Ojalá que te vaya bonito” donde quiera te encuentres.
alejandro.encinas@congreso.gob.mx
Coordinador de los Diputados Federales del Partido de la Revolución Democrática
No hay comentarios.:
Publicar un comentario